La profunda oscuridad nocturna huye
ante tu fulminante luz estelar
cuyo etéreo resplandor, encanta mí alma.
En la fría sinfonía entonada cada noche
miro al cielo lleno de esperanza
de admirar nuevamente tu belleza.
Tan lejana pero tan cerca a la vez te observo,
mientras sueño en una realidad platónica
abrazando esa brillante estela
que diriges hacia alguien mas.
jueves, 10 de marzo de 2011
Suscribirse a:
Entradas (Atom)